lunes, 29 de diciembre de 2014

Thinking about tomorrow - Beth Orton


Cada fin de año me pongo a reflexionar sobre lo que ha sido de mis días. Socialmente es una recapitulación, una forma de encapsular en tiempo en ciclos. Entre todo lo acontecido, me dio gusto este año, así que estoy preparado para lo que sea que venga.
Felices conclusiones para todos.*



martes, 23 de diciembre de 2014

Perfect sense: Oda a los sentidos



Hay oscuridad, hay luz. Hay hombres y mujeres, hay comida, hay restaurantes, enfermedades, trabajo, tráfico. Los días como los conocemos, el mundo como lo imaginamos.
Percepciones
La fui a ver en una cita, la chica con quien la disfruté era esperanza y ella había descubierto un pequeño cine coordinado con las cineteca que proyectaba películas independientes y/o de arte. A mitad de la semana los cines no suelen ser muy concurridos y en las cercanías de este cine estaban realizando algunas reparaciones, curiosamente en ningún momento se afectó la acústica, incluso durante las partes de la película en silencio.
¿Alguna vez has estado con ese tipo de chica con la que todo parece marchar perfecto? Bueno, para mi era lo que le sigue, ella era siempre mi semejante, era siempre fascinante lo parecido que eramos, todo lo que los dos compartíamos, ver mi rostro reflejado en ella, parecía un constante entusiasmo que nunca llegaría a fin. Existen personas en este mundo con quienes el tiempo se detiene, con quienes los instantes duran eternamente, con quienes solo vas hacia delante.
La vida continúa, la comida se hace más condimentada, más salada, más dulce, más ácida, te acostumbras. La pérdida más grande es la pérdida de los recuerdos, el olfato y la memoria están conectados en el cerebro, la canela podía recordarte al mandil de tu abuela, el olor de un corral podía evocar el miedo de un niño a las vacas, todos estos pueden traer recuerdos de tu primer viaje en el remolcadero. Sin el olfato un océano de imágenes del pasado desaparecen.
Esa tarde, la función tuvo sólo dos espectadores, y en ese lugar sin tiempo se conservan los eventos, suspiros, impresiones y los pies descalzos con los que deboramos cada imagen, cada sonido, cada textura y ausencia de esa maravillosa producción. Así fue mi primera vez, el sentido perfecto, la presencia indicada, la disposición adecuada. Bebo agregar alguna recomendación antes de contar de qué va la trama, Perfect sense (2011) no es una película para ver a medias. En este nuevo siglo, en esta década, es muy usual que uno ponga una película en televisión mientras hace otras cosas, ya sea en la computadora o en la casa, de ser tu caso no te recomiendo esta película. Te la recomiendo si estás descansando una tarde o una noche o una mañana, te la recomiendo ya sea sólo o acompañado  (de una o varias personas) que tengas en profunda estima, porque no es una película palomera, es una película que despierta sensaciones y emociones, más vale tener alguien apropiado para compartir lo que vendrá una vez termine. Hay mucha imágenes que admirar, muchos símbolos que comprender en sus historia.
En unas cuantas semanas, el gusto de convierte en un recuedo del pasado y diferentes sensaciones lo reemplazan. En restaurantes se trata de ofrecer una cena a otra persona, dejar que te atiendan, escuchar el sonido cuando lo sirven y el tintinear de las copas.

El sentido de los sentidos
Cuando vi Perfect sense ya había leído Ensayo sobre la ceguera (1995) de José Saramago y también había visto la adaptación (Blindness, 2008) de dicha novela, también había tenido lugar la Pandemia de gripe A (H1N1)1 entre 2009-2010; todo ello vino a mi mente mientras veía la película y me recordó lo cerca que la humanidad siempre está de la completa extinción, la vulnerabilidad de nuestra especie, algo que tendemos a dejar de lado constantemente.
La historia de Perfect sense, es simple: una epidemióloga y un chef se conocen en medio de lo que parece la pandemia última, la pérdida gradual de los sentidos. Con estas manifestaciones vendrán también algunos impulsos emocionales previos y posteriores, a la larga el fenómeno de la pandemia es una reflexión constante sobre la pérdida, pero también sobre lo que sigue después de perder.
Hay dos movimientos, la gente que corre por las calles agarrando lo que pueden, la gente que no cree en nada más que en el fin del mundo. Y está el otro movimiento, los granjeros que salen a ordeñar las vacas, los soldados que se reportan para el servicio, aquellos que creen que la vida continuará de alguna forma o simplemente no saben qué más hacer.
Ya saben que no me gustan los spoilers pero ya tras verla esta semana, nuevamente, me parece que es bastante obvio lo que les 'adelantaría', la manifestación de este extraño síndrome, el inusual marco de síntomas que afronta la humanidad, mantiene una lógica bastante convincente (o cuando menos simbólica), acercándola a procesos y enfermedades naturales de tal forma que resulta temible la posibilidad de una enfermedad como esa2.
Así, la relación entre emociones y sentidos en el momento en que son perdidos por la extraña pandemia,  tristeza - olfato, ansiedad - gusto, ira - oído, alegría - vista, son la pista que vamos encontrando en cada uno de los estados del padecimiento, un vínculo que nos habla sobre algunos de los efectos de las emociones sobre la vida.
A cada paso de la pandemia la humanidad enfrenta una gran perdida, la perdida de uno de sus sentidos, a cada paso también la desesperanza es librada siguiendo adelante, la narradora nos va mostrando cómo padecen estas pérdidas y como las superan. Perfect sense se concentra en ese aspecto de la historia, que resulta tan palpable para el espectador por el hecho de que las palabras que nos dedica a cada uno de esos momentos podrían ser las mismas que un amigo, un familiar o un terapeuta nos dirá cuando pasamos por una pérdida. Tanto Michael como Susan, los protagonistas, guardan un pasado que no han superado emoionalmente, al resistir juntos durante la pandemia tornarán esas mismas palabras hacia sus propias vidas como una manera de continuar.
Así es como desciende la oscuridad sobre el mundo. Pero primero los momentos radiantes, una reacción en masa del lóbulo temporal, una gran apreciación sobre lo que significa estar vivo, pero más que nada una necesidad compartida de acercarnos, para ofrecer calidez, comprensión, aceptación, perdón, amor.

Si bien la ciencia ficción tienen la virtud jugar con el comportamiento humano frente a las posibilidades asombrosas, en este caso se remite no a las posibilidades sociales, tecnológicas o cognitivas a las que podría enfrentarse en un evento similar, sino al aspecto emocional que el ser humano enfrenta, un acontecimiento cuyas repercuciones están en el ánimo más que en la salúd (como casi todas las enfermedades y condiciones se acompañan).
Eventualmente esa chica quien me acompañó a verla se convirtió en un ejemplo de las palabras que ésta película guarda, ¿las emociones nos privan de los sentidos o los sentidos vician nuestras emociones? Finalmente, sea cual sea la respuesta, con pérdidas o sin ellas, la vida continua y se repone, encontrará su siguiente manera de seguir adelante. Hay seguir persiguiendo la chuleta.
Ahora está oscuro, pero se sienten la respiración el uno del otro y saben todo lo que necesitan saber, se besan y sienten sus lágrimas en las mejillas. Y si queda alguien para verlos, lucen como amantes normales, acariciando sus rostros, cuerpos juntos, con los ojos cerrados, inconscientes del mundo alrededor. Porque así es como continúa la vida. Así.


1 Si no mal recuerdo Contagion (2011) se estrenaría poco después a razón de la experiencia que vivió Steven Soderberg (el director) de la pandemia durante su estancia en México.
2 La última vez que la vi, inmerso en la ciencia ficción como nunca, incluso pensé: sería el arma perfecta interestelar, dejaría muy atrás la guerra bacteriológica, las desgastantes confrontaciones, elimina a tu enemigo privandolo de sus sentidos. ¿acaso no sería la forma más practica y pacífica de conquistar mundos 'civilizados'?

viernes, 19 de diciembre de 2014

(Des)Conectados



I feel love
Siempre resulta interesante ver a los actores fuera de su tendencia, (hace algunos años era algo 'extraño' ver actores de acción en comedias1), sobre todo los comediantes que se aveturan en el drama. Adam Sandler ha tenido buenos trabajos: Spanglish (2004), Reign over me (2007), Funny people (2009); Andy Samberg en Celeste & Jesse Forever (2012), otros actores como Ben Stiller en The royal Tenembaums (2001), Greenberg (2009) o incluso Jim Carrey en Man on the moon (1999), Eternal Sunshine of the Spotless Mind (2004), The Majestic (2001) aunque también nos ha dado extrañas interpretaciones como The Truman Show (1998), Number 23 (2007), difíciles de clasificar.
Aunque en este caso, la película no es estelarizada por Sandler, la constante apuesta como expectador al trabajo de los comediantes en los dramas fue el motivo por el que busqué la película, además del tema de la película, notoriamente una critica al uso de las redes sociales que ha permitido el internet.
Una vez que la vi, me di cuenta del valor de la historia, un breve vistazo a la forma en que nuestra vida ha sido alterada por la tecnología en cuanto a la manera en que conectamos con otras personas. El texto de Sagan, Un punto azul pálido forma parte de la médula que conforma la historia, el texto que ya por sí mismo relativisa los actos humanos, es retomado en la película para hacer lo propio con la trama, sentirnos insignificantes (como sucede con las redes sociales) es al mismo tiempo dotar de trascendentalidad a cada mínimo acto.


Men women and children (2014)
Jason Reitman ha dirigido otras películas, Thank you for smoking (2005), Juno (2007) y hace no mucho Up in the air (2009)2, historias con las que nos identificamos, personajes que desencadenan emociones por las que hemos pasado o habremos de pasar, que es el motivo por el que las películas de Reitman son muy bien recibidas. La historia nos enfoca con notable imparcialidad sobre, las relaciones entre adultos, entre jovenes, y en cómo se han modificado las relaciones a través de los medios.
Aún hoy se mantiene la controversia sobre los usos de las redes sociales, el cuestionamiento sobre si las redes han dañado o no las formas en que interactuamos, si lo que mostramos de nosotros mismos en las redes es una falsa identidad o la verdadera identidad. La película nos aclara un poco sobre lo que existe detrás de los usos, las personas en conflicto, en duda, temores, en sus alegrías y nuevos experiencias. A pesar de todo, queda una singular sensación de que las relaciones han sido terriblemente afectadas por la tecnología, mi interpretación de la historia de la película, así como el fenomeno de las tecnologías es que el canal se ha vuelto frío, no las relaciones en sí.
Las tecnologías no producen matrimonios monótonos, o las cautelas en las citas entre padres solteros, las madres sobreprotectoras existen con o sin software de espionaje, los padres que enfrentan la depresión de un hijo o las madres que viven a través de sus hijas, con los errores que todo eso implica, estarán ahí estén o no las paginas web y los juegos en linea.
El gran logro de esta película es ponernos en perspectiva, ofreciendonos un lugar a todos para reconocernos en las historias y los personajes, para darnos un momneto de reflexión, como supone debe ser el arte.
Finalmente los dejo con el trailer que me convenció de verla, por su música:


1 Ahora parece un requerimiento de hollywwod para cualquier que quiera presumir musculo en pantalla. En este momentario, no incluyo las películas the Bollywood, Singham (2011) es uno de los grandes ejemplos para no tener la más remota idea de si lo que veo es acción, comedia, musical o drama.
2 De la cuál compré la novela y no me he dado el tiempo para leerla. Lo sé, mi lista de pendientes es enorme.

martes, 9 de diciembre de 2014

La gente deste mundo


La primera vez que leí a Alberto Chimal venía en copias, un profesor en cedart dejó leer El país de los hablistas (2001) en clase, aún conservo mi copia entera ya que nunca pude encontrar una edición de ese volumen, junto a un montón de pertenencias de esa etapa de mi vida se conservan guardadas hasta que vengan los días de nostalgia. Las historias de Chimal resultaban familiares, historias y situaciones que de una o muchas maneras sentía que ya conocía (incluso en esos años en que conocía poco) pero con pequeños detalles de novedad, tal vez algo que habita en sus expresiones, en su uso de las palabras o en el manejo de los conceptos a través de los cuales nos contaba las historias... fuera lo que fuera, capturó mi atención y desde entonces reconozco su nombre con entusiasmo.

El siguiente libro de su autoría que leí me lo compartió una amiga, quien se había hecho con su propia edición de Grey (2006) y aunque por aquel entonces no seguía tan de cerca la carrera de Chimal, ella me prestó su ejemplar para conocer los nuevos textos y así también sucedió una vez se publicó Los esclavos (2009). Las dos fueron interesantes, sus historias era igual de insólitas, pero las no me encantaron como la primera vez, hacía falta algo que echaba de menos, en sus textos había un discurso que apuntaba a cosas más importantes que la novedad y la creatividad. Proyectaban lo más profundo de la mente de los personajes... sus textos eran más surrealistas que fantásticos cada vez, algo que por lo general se traslapa con facilidad1, en aquellos días no me interesaba esa parte d ela literatura. Será por eso que nunca compré La torre y el jardín (2012).


Gente del mundo (1998)
Del título que escribo ahora en realidad es una reedición (una muy bonita debo agregar, Era se lució), los pequeños relatos (minificciones) son descripciones breves de tribus, practicas y pueblos de un mundo ficticio, contantemente bizarro y onirico. Los textos recuerdan a Borges y sus entramados del trasfondo, se alcanza a percibir un complejo mundo de historias, vrsiones y reversificaciones en los relatos de Gente del Mundo. Pero eso es sólo la mitad del libro.
La otra mitad está conformada por las láminas de Auko, la ignota, o lo que quedan de las láminas. Las ilustraciones permanecen envueltas en el misterio académico, se desconoce su literalidad o posibles simbolísmos, aunque hay alguna referencia a la autora y al por qué sólo queda algo rudimentario de ellas para contemplarlas, todo esto se explica a mayor detalle en los apéndices, la ultima parte del libro.
Los apéndices nos sacan del estado anécdotico en el que pueden caer equivocadamente los textos, nos incluye en la crónica del mundo que Chimal contempla y nos recopila en su texto. De esta forma conoceremos el origen de las descripciones de la gente del mundo, el origen (probable) de las láminas y al hablista que enlaza estas dos creaciones.

Chimal es un autor que con suma gracia nos golpea de lleno a la cara a través de la discreta ficción fantástica, tal como Kafka habría esperado de cualquier que asuma escribir como deber.
A Alberto Chimal me lo he encontrado en algunas ocasiones, las que más recuedo fueron esta dos, que me han dejado la buena impresión que tengo del autor. Antes de devolver el libro de Los esclavos (que tuve en mi posesión como un año, la mayor parte sin leerlo) fui a buscar a Chimal a la presentación de un libro para que lo firmara (a nombre de mi amiga claro) y cuando menos se llevara una grata sorpresa al recuperarlo. Con agrado firmó y garabateó un dibujo para mi amiga y me regaló las paginas del pequeño discurso que dio para la presentación cuando elogié algunas de sus palabras.
Lo vi también en alguna función de Farenheit 541 en una de las ediciones de la FILIJ (no recuerdo cual) aunque no me pudiera quedar a verla (la chica con quien iba resultó algo arisca) y si lo he encontrado alguna otra ocasión, no llega a mi mente ahora.
Y ya pensando las cosas, uno de estos días seguramente me compro La torre y el jardín.


1 Como puede verse en una película como Brazil (1985) y muchas otras creaciones e Terry Gilliam.

viernes, 5 de diciembre de 2014

Pero mira como beben los peces en el río


Más Jorge Pinto. Ayer estaba revisando mis cosas, encontré dos cosas que me recordaron a este muchachón: el libro de los Hipsters (que aún no he leído (neta, solo lo he podido ojear (dos veces))) y la postal que le compré en la Festo Cómic (creo que fue 2012...) y que firmó aludiendo a la ciencia a la que me dedico. Por eso sólo tengo unas sencillas palabras para él: ME VENGARÉ, PINTO.
Pero visitenlo en su pagina.


miércoles, 3 de diciembre de 2014

Mad world - Tears For Fears


That day, I learned life and death are always so mixed up togheter, in the same way some beginnings are endings and some endings become beginnings