Como todos en su momento vi Lost (2004 - 2010) por el furor de su historia y misterios, como todos me sentí intrigado por sus extraños acontecimientos y sus atormentadas personalidades enlazadas, sin embargo no llegué más allás de la segunda temporada mientras estuvo en emisión (como ocurriera con
Dexter), la serie no me atrapó por completo y no tuve necesidad de seguir la trama en tiempo real. Sin
embargo leí acerca de los vínculos que guarda con las tramas de The
Stand (1978) de Stephen King (quien declaró su gran aprecio por la serie en su
columna: The pop of King), con la trilogía Illuminati de Robert Shea y
Robert Anton Wilson y con la no menos importante serie cómic (o novela
gráfica) de Watchmen (1986 - 1987) de Alan Moore (les escribiré próximamente) y es por estas referencias, hace no muchos meses
atrás, por lo que decidí volver a iniciarla para concluirla.
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Perdiendo... la vista |
Aún
recuerdo la tira en Bunsen de Jorge Pinto sobre el extraño final de Lost, la
cual me encantó a pesar de no haber seguido la mitad de la serie ni visto dicho
final, los comentarios y algunas
sinopsis de la quinta temporada me habían enterado de que la trama tomó algunos cursos bastante extraños. Por su puesto cuando
me dediqué a ver la serie por completo entendí los reproches sobre aquel final y
más que descontento, me pareció que la serie llegó a su termino una temporada antes, en la quinta (de hecho el final de ésa es coherente con la fotografía del inicio), mientras que la sexta parece más un compromiso con el publico o la
televisora para extender la rentabilidad lo más posible. Hay bastante que reflexionar sobre
el complejo entramado, los vínculos entre sus personajes o sus referencias a muchas otras obras, en su momento cambió los
estándares de la ficción en televisión (probablemente no conoceríamos Game of Thrones sin esta loable serie) pero en esta ocasión, a fin de no spoilear si no has visto la serie, me restringiré a las impresiones generales sobre la historia completa.
4, 8, 15, 16, 23, 42
La serie comenzó bastante bien, mostrándonos un montón de personalidades muy distintas emerger de un accidente aéreo, atormentados por su pasado conflictuados en su presente, pero además enfrentándose a un futuro incierto. Vimos al cirujano lleno de culpabilidad que se vuelve el líder por la necesidad comunitaria (alguien recuerda the Stand?), a la fugitiva que resulta encantadora, el estafador misterioso (que se termina ganando nuestro corazón), el tipo sabio y extraño que guarda un secreto (con un increible parecido a Gog), el padre obsesionado con el fragil vínculo con su hijo, el esposo machista curtido por la discriminación... Todo fue muy bien cuando tomaron a todos estos personajes y les pusieron pruebas extrañas: misteriosas criaturas en la jungla, misteriosas instalaciones abandonadas, misteriosas comunidades escondidas y misteriosos personajes conspiradores, la trama sobrevivió a todo esto y más.
Porque la historia nos sumerge no solo en un punto intermedio entre la fantasía y la ciencia ficción (en sentido estricto todo esto sería una ciencia ficción blanda, muy blanda), los fenómenos de la isla parecen totalmente desligados unos de otros y llevan al límite nuestras capacidades para encontrarle una lógica a todo el asunto durante cada capítulo, exige recordar detalles y estar atento a la temporalidad, las memorias de los diversos protagonistas y sobre todo cada episodio está saliendo directamente desde la perspectiva del personaje (el espectador emerge directamente del iris de los protagonistas en cada ocasión), siendo cada uno de ellos el protagonista de su propia historia envuelta al accidente del vuelo 815, la isla y los sobrevivientes, por lo que constantemente resulta vano intentar tomar partido por alguno de ellos o sus bandos.
Resulta imposible tratar de encasillar como buenos o malos los actos (una de las razones por las que la última temporada pierde sentido) cada uno de ellos persigue objetivos e intereses, confrontan las adversidades y extrañezas de un mundo azaroso y complicado que parece haberlos destinado a la isla, que llega a convertirse en una entidad por su rol activo que interactúa con ellos de formas misteriosas
1.
El drama entre los personajes no queda en segundo plano, por el contrario es el medio que sigue moviendo el engranaje de la historia, sus impulsos, el carácter de cada ándonos sus alegrías, tristezas, dudas y secretos, les convierte en alguien con quién identificarnos por lo que sienten y experimentan sin importar lo breve o duradero de su rol durante la serie.
La narrativa de la serie, apoyada en flashbacks y flashforwards resultó un medio excelente para mostrarnos no cómo surgieron los personajes y todo lo que los condujohacía el vuelo 815, ninguno de ellos es un personaje vacío, todos llegan con su cuenco lleno y en el transcurso de la historia así como sus experiencias en la isla lo vaciar para transformarse en personas distintas. Ninguno de los personajes sigue siendo el mismo para cuando concluye la serie.
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Miradas confundidas everywhere |
La multiplicidad de facetas y personalidades ha sido un campo fertil para relacionar elementos y características entrañables comparables a otras historias, por supuesto los vínculos dicotómicos entre personajes que son 'opuestos' en uno o varios sentidos, los hombres prácticos: el líder atormentado por la memoria de su padre así como las decisiones del pasado, de los supervivientes (Jack Shepard) o de los Otros (Benjamin Linus); los estafadores, el veterano (Antonie Cooper) y el vengativo (Sawyer); los hombres de fe (Locke, Eko) forjados en la tragedia, ocultos a plena vista; los fugitivos de guerra y de crimen atormentados por los sacrificios familiares (como Sayid y Kate) y así infinitamente, habría lugar para otra o varias publicaciones en el blog analizando las correlaciones entre todos ellos o vinculando los perfiles de los personajes con los de Watchmen y The Stand, pero me parece que ya muchos blogs y paginas se dedicaron a eso por años.
Lost retoma acertadamente muchos elementos de estos dos clásicos, de la misma manera que The Stand nos narra cómo los sobrevivientes restablecen relaciones para fundar sociedad, Lost nos lo muestra, de la misma forma que Watchmen nos plantea las complicadas relaciones entre protagonistas que en sus particularidades se mantienen unidos, también Lost lo logra, muchas veces sin aclararnos del todo lo que los ase tan poco ordinarios. Ello se debe no solo porque retoman elementos de historias anteriores bien construidas sino por la libertad creativa que los guionistas y los actores se permitieron al momento de ir formulando la serie, por ejemplo, el personaje de Hurley no existía antes de las audiciones y algunos de los personajes estaban pensados para interpretarse por otros actores, conforme se presentaron actores y las temporadas la historia tomó forma
Conforme la historia progresó se fue llenando de elementos que le daban más firmeza a los
misterios recurrentes, no acumuló misterios sobre misterios constantemente (como sucedió con la última temporada) sino que complejizó los elementos con los que ya contaba. aunque podría parecer lo contrario por la cantidad de personajes que se integraron y salieron durante las temporadas, las historias de estos roles aparentemente secundarios realmente seguían contribuyendo a profundizar la historia general, el relato de la isla y los seres humanos que se cruzaron constantement con ella.
you Lost me
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Las conexiones hasta la segunda temporada |
Con todos estos elementos uno se pregunta qué fue lo que falló en la última temporada, a decir verdad no fueron los personajes, elementos o la intensidad de sus experiencias y ciertamente no fueron sus historias las que me decepcionaron. Como dije al inicio del texto la sexta temporada fue un desafortunado sobrante de la serie, pareciera que fue realizada por un sentimiento de culpa por haber dejado demasiados puntos en torno a la isla, aspectos pilares a la trama en terreno incierto, pareciera que subestimaron la elegancia de dejar cabos sueltos en una buena historia, lo inecesario que puede ser tener todas las respuestas.
Los personajes fueron afrontando retos progresivos conforme se adentraron en los misterios de la isla, de enfrentar la escases a enfrentar el liderazgo, a enfrentar la coexistencia, la conspiración, la lógica de la naturaleza. La quinta temporada durante la cual los protagonistas comenzaban a retomar una nueva vida en la isla (distintos lugares, oficios y tiempos) los conduce lenta y repentinamente hacia la catástrofe, una amenaza no sólo para la isla que habitaban sino para todo el continuo temporal de la isla, todo lo que ya habían logrado, también teodo en lo que se habían convertido. n los últimos capítulos acompañamos angustiados e intrigados todos los esfuerzos para evitar el olvido, tomándose de las manos en los minutos más deseperanzadores de mi vida como televidente. El final de la quinta temporada me dejó suspendido, no nos enterábamos si lo habían logrado, lo último que veíamos de ellos era el título de inicio, la palabra Lost en un fondo blanco con letras negras (los colores del intro invertidos) y deseando que lo que sea que hubieren hecho resultara. Ese era un gran final, porque dejaba al espectador en la cúspide de un sentimiento no solo por algún personaje, no solo por alguna situación si no por toda la historia.
Pero nos dieron otra temporada y no sabríamos que nos arrepentiríamos hasta que ya era demasiado tarde.
Ni siquiera me parece que valga la pena mencionar lo que aconteció en la siguiente temporada, porque todo ello era una especie de ilusión, una suerte de epilogo demasiado largo, que jugó con nuestra sensatez. Una burdfa e infantil batalla entre dos fuerzas representada por los personajes (sí exactamente esa que estás pensando). La sexta temporada quizás iniciaba a relatarnos la historia de la isla, practicamente desde sus orígenes, en cierto sentido la concretó en un personaje más activo, al mismo tiempo más fantástico y al mismo tiempo más inverosímil, al final Lost empezó a convertirse en una mala broma de fantasía (probablemente a los fans de Once upon a time, les encante) porque necesitaban introducir muchos elementos nuevos para concluir los eventos que se habían gestado en el misterio tras bambalinas.
Para mi, el gran final de Lost está ahí, ese final lleno de sacrificio y misterio, lleno de dolor y esperanza ciega, ese final blanco, luminoso que nos enseñó que la vida no es algo que inicia y acaba sino un ciclo indefinido, un final que no nos engaña y nos deja en claro que sólo estamos formando parte de un constante continuo. Por que así es la vida.
1 Casi como la
canción de U2