lunes, 23 de febrero de 2015

Dexter is dead


Mientras Dexter estuvo en emisión sentí alguna curiosidad por verlo pero nunca me lo tomé en serio porque tampoco me parecía tan interesante. Fue recientemente, tras leerme la trilogía de Hannibal y su precuela, luego de algunas cavilaciones sobre el ícono del asesino serial en la actualidad, cuando me di el espacio semanal para ver los episodios.

Dexter (2006-2013)
Por si acaso no tienes idea de qué trata esta serie: es la historia de un criminólogo de Miami, un especialista en la dinámica de la sangre en escenas de crimen para deducir los hechos, su oscuro secreto, su oscuro pasajero, es su patológica necesidad de asesinar, la cual satisface partiendo de un código que su padre adoptivo le dejó, por lo que sólo asesina... a otros asesinos, al menos los que escapan a las garras de la ley o a los que por asares de las tramas se echa encima.
La serie resulta agradable y divertida, conforme avanzan los episodios la intriga en torno a su pasatiempo con otros asesinos es no sólo interesante sino divertida, todo es muy colorido y sensual en Miami (algo que venía sospechando desde Scareface (1983)) por lo que resulta una serie muy entretenida. Dexter procura llevar una vida aparente normal para disimular su oscuro pasajero, por lo que tiene un noviazgo con una madre soltera, Rita, trabaja en el departamento de policía junto a su hermana, quien suele ser más metiche e impulsiva que un personaje de Friends, comparte con sus compañeros de trabajo algunas cosas, el jefe de aires paternales, el pervertido de la oficina (japonés), la jefa ruda, es decir un montón de estereotipos. Todo esto se combina con su constante discurso interno sobre su trabajo, las personas, sobre la vida y sobre sus impulsos, resulta verdaderamente una gran historia, hasta la cuarta temporada. Pero ya llegaré a ese punto.

La primera temporada está inspirada en la novela de Jeff Lindsay, dramaturgo y novelista, de 2004 Dexter: el oscuro pasajero, ha escrito hasta el final de la serie, en la octava temporada, había escrito siete libros y este año volverá a publicar una historia sobre Dexter... y esto es así porque la correspondencia entre las novelas y la serie se limita al primer volumen, tanto la saga literaria como los episodios siguen continuidades diferentes, por lo tanto podemos referirnos a la serie independientemente del autor, a quien aún no estoy seguro de leer.


La historia, que duró ocho temporadas, de hecho tiene una evidente (des)variación, hasta la cuarta temporada los personajes son constantes, sus identidades no cambian, solo cambia la trama que los envuelve, los casos, los antagonistas y los nudos, la historia se mantiene y todos los espectadores podemos ser felices. Durante cuatro temporadas, Dexter se enfrenta a su pasado familiar, es casi el lugar donde se deshacía de los cuerpos es descubierto, se hace de un amigo influyente y reconoce en uno de sus objetivos un ejemplo a seguir en su vida, pero todos estos interesantes giros y novedades siempre son ilusorios y al final del día la vida de Dexter vuelve a su lugar con ligeras diferencias.
Entonces llega la quinta temporada, a partir de la cual se nota un rumbo muy distinto en la producción, los personajes comienzan a enfrentar eventos que de los que ya no pueden salir indemnes, necesariamente tienen que cambiar, la esencia de sus personalidades se ve alterada, los nuevos antagonistas ante los que se encuentra Dexter son distintos, son más complejos, los personajes secundarios también comienzan a verse alterados gradualmente. Esta segunda parte de la serie me encanta porque los personajes crecen, progresan y maduran, pero está dejando de ser el Dexter que durante tantas temporadas nos prometieron. De hecho las partes más memorables de la serie están en esta segunda parte, sus antagonistas, sus errores, los crímenes a los que se enfrenta; con todo y estas grandezas, la octava temporada es básicamente vómito. Vómito en la cara.

No dejo de pensar que los guionistas terminaron odiando a Dexter, al personaje y su historia. En la octava temporada, cuando todo en la historia te da esperanzas sobre la posteridad de la vida del asesino serial, no una, sino varias veces, cortan de tajo (en algunas ocasiones de forma literal) las esperanzas. Lo que me convence aún más de esto último, es que la ultima media hora de la serie está hecha para destruir a Dexter sin más.

Cena familiar: la terapeuta, la maquiavélica, el asesino y el aprendiz.

La serie debió terminar al final de la cuarta temporada, cuando Dexter encuentra a su hijo en un charco de sangre, era un final épico, cíclico, conclusivo. Pero no se puede todo en la vida. Para los que hemos visto parte de Six feet under (2001-2005), tal vez sea extraño ver a Michael C. Hall en un papel heterosexual, de hecho me costó bastante convencerme de ello.


Galardones con spoilers:

El mejor sexo de la serie: Hannah, a quien asesinaría. Pero ya que estaba desnuda sobre su mesa, ¿qué más da?
El mejor villano: Isaak Sirko, un líder mafioso ucraniano entregado a la venganza por el asesinato de su amante.
El mejor caso: los secuetradores de Lumen, los asesinos en grupo que básicamente industrializaron su crimen.
Escena favorita: La cena familiar en casa de la Dra Vogel.

jueves, 19 de febrero de 2015

Les Revenants


A causa de mi encanto por Mogwai fue que llegué al soundtrack que orquestaron para la serie Les Revenants (2012), sin embargo una vez comencé a ver los capítulos (que no encontré alojados en ningún sitio, los tuve que descargar mediante Torrent) noté que yo tenía la versión EP del soundtrack, así que tuve que buscarme la versión completa, que curiosamente se lanzó después de la serie, terminé de ver la serie quedando entusiasmado, confundido e intrigado durante algunos días.

Las gemelas Camille y Lena (ya no tan iguales) y sus padres (ya no tan casados).

Hungry Face
En Annecy algunas personas comienza a parecer, se dirigen a sus casas y lugares comunes pero descubren que todo ha cambiado, el tiempo no ha pasado para ellos y hasta entonces todos ellos estaban muertos. Lo que comienza como un milagro para los pobladores de este pequeño lugar junto a la presa lentamente se convierte en una serie de confrontaciones personales con el pasado. Muchos de los vivos tienen que enfrentar hechos que parecían haber concluido cuando todos ellos murieron, lentamente se dan cuenta de que todo su pasado sólo había quedado oculto por el velo de la muerte.

Sin embargo se van planteando otras incógnitas: ¿Por qué y cómo volvieron? ¿Por qué nadie puede comunicarse o salir de Annecy? Bueno, ninguna de estas preguntas será resuelta.
La historia de Les Revenants es sobre qué sucede cuando el pasado vuelve a confrontarte. Esta es la historia de la gemela adolecente y su familia fragmentada, del novio que nunca llegó a su boda y la novia que siguió adelante con su vida, del hermano del cantinero que guardaba una siniestra práctica, del niño silencioso encontrado por la sobreviviente al ataque de un asesino.
La serie es en realidad una adaptación de la película Les Revenants (2004) de Robin Campillo que mantiene la misma premisa (no he podido encontrarla, para verla) y hasta donde sé no está basada en nada más. Siguiendo un poco algo que habría escrito el propio Saramago, Les Revenants cuestiona los limites de la cordura y el comportamiento ante un evento que golpea de lleno la sociedad.
Todos ponemos esa cara cuando reaparece un Ex.
Una vez más Mogwai me remite a una historia genial. Tan sólo el intro ya me encanta (veanlo por aquí ya que no permite inserción), tiene una gran composición, ritmo, anticipación de los personajes, de la trama, etc.

Muchos Retornados
Luego me entero de una versión americana, The Returned (2015), de la cual sólo vi el primer episodio porque me di cuenta de que aceleran un poco la trama (seguramente para poder agregar algunos elementos extra) pero ¿para qué querría ver lo mismo con fotografía, música o actuaciones que no son asombrosas? Pero esta es sólo la última versión. En 2013 una novela también llamada The Returned, de Jason Mott es publicada y un año después se realiza una serie más americana que el pay de manzana, nombrada Ressurrection que sigue justo la misma premisa. Me pregunto si realmente hace falta tanta duplicación.



jueves, 12 de febrero de 2015

Lost(est)


Como todos en su momento vi Lost (2004 - 2010) por el furor de su historia y misterios, como todos me sentí intrigado por sus extraños acontecimientos y sus atormentadas personalidades enlazadas, sin embargo no llegué más allás de la segunda temporada mientras estuvo en emisión (como ocurriera con Dexter), la serie no me atrapó por completo y no tuve necesidad de seguir la trama en tiempo real. Sin embargo leí acerca de los vínculos que guarda con las tramas de The Stand (1978) de Stephen King (quien declaró su gran aprecio por la serie en su columna: The pop of King), con la trilogía Illuminati de Robert Shea y Robert Anton Wilson y con la no menos importante serie cómic (o novela gráfica) de Watchmen (1986 - 1987) de Alan Moore (les escribiré próximamente) y es por estas referencias, hace no muchos meses atrás, por lo que decidí volver a iniciarla para concluirla.

Perdiendo... la vista

Aún recuerdo la tira en Bunsen de Jorge Pinto sobre el extraño final de Lost, la cual me encantó a pesar de no haber seguido la mitad de la serie ni visto dicho final, los comentarios y algunas sinopsis de la quinta temporada me habían enterado de que la trama tomó algunos cursos bastante extraños. Por su puesto cuando me dediqué a ver la serie por completo entendí los reproches sobre aquel final y más que descontento, me pareció que la serie llegó a su termino una temporada antes, en la quinta (de hecho el final de ésa es coherente con la fotografía del inicio), mientras que la sexta parece más un compromiso con el publico o la televisora para extender la rentabilidad lo más posible. Hay bastante que reflexionar sobre el complejo entramado, los vínculos entre sus personajes o sus referencias a muchas otras obras, en su momento cambió los estándares de la ficción en televisión (probablemente no conoceríamos Game of Thrones sin esta loable serie) pero en esta ocasión, a fin de no spoilear si no has visto la serie, me restringiré a las impresiones generales sobre la historia completa.

cortesía de Jorge Pinto

4, 8, 15, 16, 23, 42
La serie comenzó bastante bien, mostrándonos un montón de personalidades muy distintas emerger de un accidente aéreo, atormentados por su pasado conflictuados en su presente, pero además enfrentándose a un futuro incierto. Vimos al cirujano lleno de culpabilidad que se vuelve el líder por la necesidad comunitaria (alguien recuerda the Stand?), a la fugitiva que resulta encantadora, el estafador misterioso (que se termina ganando nuestro corazón), el tipo sabio y extraño que guarda un secreto (con un increible parecido a Gog), el padre obsesionado con el fragil vínculo con su hijo, el esposo machista curtido por la discriminación... Todo fue muy bien cuando tomaron a todos estos personajes y les pusieron pruebas extrañas: misteriosas criaturas en la jungla, misteriosas instalaciones abandonadas, misteriosas comunidades escondidas y misteriosos personajes conspiradores, la trama sobrevivió a todo esto y más.
Porque la historia nos sumerge no solo en un punto intermedio entre la fantasía y la ciencia ficción (en sentido estricto todo esto sería una ciencia ficción blanda, muy blanda), los fenómenos de la isla parecen totalmente desligados unos de otros y llevan al límite nuestras capacidades para encontrarle una lógica a todo el asunto durante cada capítulo, exige recordar detalles y estar atento a la temporalidad, las memorias de los diversos protagonistas y sobre todo cada episodio está saliendo directamente desde la perspectiva del personaje (el espectador emerge directamente del iris de los protagonistas en cada ocasión), siendo cada uno de ellos el protagonista de su propia historia envuelta al accidente del vuelo 815, la isla y los sobrevivientes, por lo que constantemente resulta vano intentar tomar partido por alguno de ellos o sus bandos.

Resulta imposible tratar de encasillar como buenos o malos los actos (una de las razones por las que la última temporada pierde sentido) cada uno de ellos persigue objetivos e intereses, confrontan las adversidades y extrañezas de un mundo azaroso y complicado que parece haberlos destinado a la isla, que llega a convertirse en una entidad por su rol activo que interactúa con ellos de formas misteriosas1.
El drama entre los personajes no queda en segundo plano, por el contrario es el medio que sigue moviendo el engranaje de la historia, sus impulsos, el carácter de cada ándonos sus alegrías, tristezas, dudas y secretos, les convierte en alguien con quién identificarnos por lo que sienten y experimentan sin importar lo breve o duradero de su rol durante la serie.
La narrativa de la serie, apoyada en flashbacks y flashforwards resultó un medio excelente para mostrarnos no cómo surgieron los personajes y todo lo que los condujohacía el vuelo 815, ninguno de ellos es un personaje vacío, todos llegan con su cuenco lleno y en el transcurso de la historia así como sus experiencias en la isla lo vaciar para transformarse en personas distintas. Ninguno de los personajes sigue siendo el mismo para cuando concluye la serie.

Miradas confundidas everywhere

La multiplicidad de facetas y personalidades ha sido un campo fertil para relacionar elementos y características entrañables comparables a otras historias, por supuesto los vínculos dicotómicos entre personajes que son 'opuestos' en uno o varios sentidos, los hombres prácticos: el líder atormentado por la memoria de su padre así como las decisiones del pasado, de los supervivientes (Jack Shepard) o de los Otros (Benjamin Linus); los estafadores, el veterano (Antonie Cooper) y el vengativo (Sawyer); los hombres de fe (Locke, Eko) forjados en la tragedia, ocultos a plena vista; los fugitivos de guerra y de crimen atormentados por los sacrificios familiares (como Sayid y Kate) y así infinitamente, habría lugar para otra o varias publicaciones en el blog analizando las correlaciones entre todos ellos o vinculando los perfiles de los personajes con los de Watchmen y The Stand, pero me parece que ya muchos blogs y paginas se dedicaron a eso por años.
Lost retoma acertadamente muchos elementos de estos dos clásicos, de la misma manera que The Stand nos narra cómo los sobrevivientes restablecen relaciones para fundar sociedad, Lost nos lo muestra, de la misma forma que Watchmen nos plantea las complicadas relaciones entre protagonistas que en sus particularidades se mantienen unidos, también Lost lo logra, muchas veces sin aclararnos del todo lo que los ase tan poco ordinarios. Ello se debe no solo porque retoman elementos de historias anteriores bien construidas sino por la libertad creativa que los guionistas y los actores se permitieron al momento de ir formulando la serie, por ejemplo, el personaje de Hurley no existía antes de las audiciones y algunos de los personajes estaban pensados para interpretarse por otros actores, conforme se presentaron actores y las temporadas la historia tomó forma
Conforme la historia progresó se fue llenando de elementos que le daban más firmeza a los misterios recurrentes, no acumuló misterios sobre misterios constantemente (como sucedió con la última temporada) sino que complejizó los elementos con los que ya contaba. aunque podría parecer lo contrario por la cantidad de personajes que se integraron y salieron durante las temporadas, las historias de estos roles aparentemente secundarios realmente seguían contribuyendo a profundizar la historia general, el relato de la isla y los seres humanos que se cruzaron constantement con ella.

you Lost me
Las conexiones hasta la segunda temporada
Con todos estos elementos uno se pregunta qué fue lo que falló en la última temporada, a decir verdad no fueron los personajes, elementos o la intensidad de sus experiencias y ciertamente no fueron sus historias las que me decepcionaron. Como dije al inicio del texto la sexta temporada fue un desafortunado sobrante de la serie, pareciera que fue realizada por un sentimiento de culpa por haber dejado demasiados puntos en torno a la isla, aspectos pilares a la trama en terreno incierto, pareciera que subestimaron la elegancia de dejar cabos sueltos en una buena historia, lo inecesario que puede ser tener todas las respuestas.
Los personajes fueron afrontando retos progresivos conforme se adentraron en los misterios de la isla, de enfrentar la escases a enfrentar el liderazgo, a enfrentar la coexistencia, la conspiración, la lógica de la naturaleza. La quinta temporada durante la cual los protagonistas comenzaban a retomar una nueva vida en la isla (distintos lugares, oficios y tiempos) los conduce lenta y repentinamente hacia la catástrofe, una amenaza no sólo para la isla que habitaban sino para todo el continuo temporal de la isla, todo lo que ya habían logrado, también teodo en lo que se habían convertido. n los últimos capítulos acompañamos angustiados e intrigados todos los esfuerzos para evitar el olvido, tomándose de las manos en los minutos más deseperanzadores de mi vida como televidente. El final de la quinta temporada me dejó suspendido, no nos enterábamos si lo habían logrado, lo último que veíamos de ellos era el título de inicio, la palabra Lost en un fondo blanco con letras negras (los colores del intro invertidos) y deseando que lo que sea que hubieren hecho resultara. Ese era un gran final, porque dejaba al espectador en la cúspide de un sentimiento no solo por algún personaje, no solo por alguna situación si no por toda la historia.
Pero nos dieron otra temporada y no sabríamos que nos arrepentiríamos hasta que ya era demasiado tarde.

Ni siquiera me parece que valga la pena mencionar lo que aconteció en la siguiente temporada, porque todo ello era una especie de ilusión, una suerte de epilogo demasiado largo, que jugó con nuestra sensatez. Una burdfa e infantil batalla entre dos fuerzas representada por los personajes (sí exactamente esa que estás pensando). La sexta temporada quizás iniciaba a relatarnos la historia de la isla, practicamente desde sus orígenes, en cierto sentido la concretó en un personaje más activo, al mismo tiempo más fantástico y al mismo tiempo más inverosímil, al final Lost  empezó a convertirse en una mala broma de fantasía (probablemente a los fans de Once upon a time, les encante) porque necesitaban introducir muchos elementos nuevos para concluir los eventos que se habían gestado en el misterio tras bambalinas.
Para mi, el gran final de Lost está ahí, ese final lleno de sacrificio y misterio, lleno de dolor y esperanza ciega, ese final blanco, luminoso que nos enseñó que la vida no es algo que inicia y acaba sino un ciclo indefinido, un final que no nos engaña y nos deja en claro que sólo estamos formando parte de un constante continuo. Por que así es la vida.



1 Casi como la canción de U2

jueves, 5 de febrero de 2015

Otomo / Escher


Recientemente fui a mi pagina favorita de cómics, para descargarme algo de Katsushiro Ōtomo , tengo intenciones de leer Akira (he estado tratando de encontrar la edición japonesa sin éxito) y mientras tanto me he introducido con Pesadillas (童夢 Domu, 1980) y Memorias (メモリーズ, 1990). En este último figuran esta imagen, en alusión a Escher. Ese Ōtomo es un loquillo.



martes, 3 de febrero de 2015

Cool guys don't look at explosions - The Lonely Island


Hay muy buenas canciones/bromas de estos chicos, pero esta en particular y por su rareza, es una de mis preferidas. Es un buen tono para celular, cool.