Keys to the city - The Go! Team

Estoy encantado con The Go! Team, sobre todo con Ninja (su vocalista con actitud), es como es tipo de música que debería usar en mi despertador para levantarme sin falta. Tienen toda una serie de rolas en la misma frecuencia. Así que ponganse los tenis y salgan a correr tras el pacman conmigo.

Wake up, wake up.

El síndrome de HIMYM

Cuando comencé a ver How I Met Your Mother (2005-2014) me parecía grandiosa porque me identificaba con sus personajes y situaciones, era común entre mis amigos y yo hacer referencias a algunos de sus chistes y compartir nuestras experiencias con paralelismos a la experiencias mostradas en sus capítulos para reflexionar nuestras propias experiencias.

Esa última hora de la serie y toda la última temporada es muy parecida al niño que trata de terminar las últimas diez preguntas del examen mientras el profesor pasa lugar por lugar a recoger los exámenes, tal vez debieron dejar respirar el vino (diría Ted) pero me parece comprensible se vieran presionados a meter toda la trama y vueltas de tuerca que habían ido adeudando desde el inicio, si no torcías al público en lo últimos tres minutos no habría tenido el mismo efecto en los corazones de la gente que tenemos un viejo amor olvidado.

Quiero pensar que los guionistas ya tenían contemplado ese final, ese par se aprovechó de nuestra credulidad como televidentes. Nos tomaron por nueve temporadas para hacernos reír con historias originales a enseñarnos cosas sobre la vida el universo y todo lo demás para luego decir: ‘si bueno pero estos nueve años no importan realmente, lo que importa es que Ted le ha dado mucha atención a Robin ¿a nadie le parece extraño eso?’

Nos mostraron que el amor tan delicadamente profesado es nada de la noche a la mañana, no importa cuánto te esfuerces, no importa cómo comenzó (una trompeta, blablá, una protesta ciudadana, la cocina de una boda) la verdad es que las relaciones son fútiles a excepción de Marshall y Lily pero que nunca vimos nacer, por lo que esa esencia de lo que hace funcionar a una relación se quedan en el misterio.

Hace algún tiempo me encontré con un vídeo de Dayo Script sobre la serie y me tranquilizaba encontrar la misma impresión sobre la serie, como el romance entre Ted y Robin, no espera, entre Barney y Robin, no espera entre Barney y Quinn, ¿o sí era Barney y Robin?

Porque durante toda la serie se repite el mismo sentimiento, un nuevo enamoramiento que resulta no serlo, pero cada nueva emocionante relación fallida de Ted nos recuerdan que toda la serie va de cómo se encuentra con 'la madre' y aunque Victoria (la repostera que sabía alemán) dice a Ted que lo que tuvo con Robin no lo iba a dejar seguir a delante al final podemos estar seguros de que… pero aguarda un minuto, eso fue justo lo que pasó. Y de esa manera la Corneta azul llega a significar muchas y profundas cosas… es un ‘no te olvido’ y ‘aún te amo’ un icono del primer amor en los años maduros, para cuando estemos cuarentones y solteros podamos tener un icono y nos permitamos reanudar las viejas relaciones, porque… a todos les pasa ¿no?

La historia de Ted vuelve a ser un ‘lifes goes on’, como en una novela de Paul Auster, es un ‘aquí no hay final, la vida continua’. They are such a heartless people! –me dijo un amigo cuando terminé de ver el capítulo (quien me esperó generosamente sin spoilear)- What matters if life is not a fairy tale! That is what fairy tales are for! To make true what couldn´t be true otherwise! That was a love story and they take more than one season to make us accept the breaking of Ted and Robin and then they make us accept that the mother was the Ted´s true love!

No soy sarcástico cuando digo que el final fue bueno, el final nos recuerda que nada es para siempre, que incluso lo más esperado es solo un instante de tres minutos y que los momentos más abandonados parecerían haber sucedido ayer, el final es bello, emotivo, impactante, deja una cantidad casi infinita de posibilidades abierta pero… No es el final para how I met your mother, no encaja con su propuesta inicial, ni siquiera con el título.

Recientemente me crucé con el azar de ver When Harry Mets Sally (1989) y a mi parecer, descubrí la fuente de lo que trata de contarnos HIMYM, una historia sobre lo confuso y enredoso que son las relaciones con momentos de humor memorables y practicamente perfectos, con la única diferencia claro, de que Rob Reiner lo hace estupendamente en 96 minutos, mientras HIMYM se tardó 9 temporadas en fracasar penosamente.

Mantener una serie en emisión durante nueve años no es cualquier cosa, los personajes crecieron y cambiaron conforme pasaba el tiempo, los actores también, y mantener a un equipo de cinco actores principales no es poca cosa. ¿Qué ocurrió? La historia que pretendieron contar no fue mala, solo mal desarrollada.

Hace relativamente poco terminé una relación y fue reflexionando con una de mis mejores amigas sobre algunos de estos aspectos, que ella decía: "Se trata de seguir adelante, porque puede haber algo más que te estés perdiendo por estar esperando" pero cuando llegas al cenit presente de tus emociones resulta difícil ver otras cumbres. En cierto sentido esto es el problema de HIMYM, Ted en realidad nunca nos está contando la historia desde la posteridad, en realidad nos está contando la historia desde el presente de las anécdotas (lo cual es un fallo narrativo) nos cuenta constantemente cada anécdota de su vida como si tuviera perspectiva de la posteridad, que sí tiene porque nos está narrando todo en retrospectiva. Por ello cae constantemente en el relato de cada experiencia irrelevante tratándola como si fuera lo más trascendente de su vida, tal vez sí debería ser un síndrome, el síndrome de How I met your mother (o de Barney Stinson).

La última lección de Bays y Thomas, los guionistas, fue que el amor no es para siempre y al mismo tiempo no es sencillamente olvidable, de igual manera su serie tendrá un lugar en nuestra memoria por sus buenos momentos pero su final la delegará mientras encontramos algo que realmente dure para siempre en nuestros corazones.

Pero no todo es una perdida, en la serie, nos presentó ampliamente el trabajo de Cobie Smulders, Jason Segel y Alyson Hanningan además de devolvernos a Neil Patrick Harris a la escena actoral, porque basta una película de Josh Radnor (Liberal Arts, 2012) para notar que su interpretación se limita a un personaje. ¿Y quién no adora a Neil Patrick Harris?

100 años de belleza - WatchCut

No es en aras de próximo día de la mujer, sino mas bien que en estas semanas me encontré con estos clips (que se dedican también a la historia de los looks masculinos) y conocí el trabajo de Rhoya Selden, que además de ser guapa, estudió historia en Washington (omg, estoy enamorado) y fue la encargada de documentar el vídeo de 100 años de belleza en México.



Pueden encontrar la serie de clips que WatchCut Video han colgado en Youtube, sobre historia de la moda (en la apariencia facial) durante los últimos cien años. Éstos son la prueba fehaciente de que todas las mujeres son únicas. Yo ya me di gusto con India, Italia y Japón (h-e-r-m-o-s-a-s). También echenle una mirada al de los Tatuajes!

Flower - Liz Phair

Rebelde, tentadora, Liz Phair. La verdad es que no le había tomado mucha atención a su música, solo me parecía simpática (tenía años que no escuchaba la canción). La última vez que la estaba oyendo reparé en que nunca había puesto atención a la letra (la última vez no sabía inglés) y me desconcertó la música enternecedora junto a una letra tan provocadora. Sí bueno, les parecerá que no es tan raro ahora pero en la primera década de los 2000s era toda una polémica. Joyitas como esta hicieron posible presentar a Seth Rogen-James Franco, Sasha Baron-Cohen, Zach Galifianakis, entre otros sin que tus abuelitas se fueran de espaldas. De nada Millenials.

Qué diablos, seguiré escuchando esta canción toda la tarde.